Toluca, Edomex. 12 de abril de 2019.- Ayer se aprobó una nueva reforma laboral federal. Es la tercera en menos de siete años, pero una ha ido conectada con la otra. Las modificaciones legales tendrán consecuencia en la política laboral local. Es inaplazable la desaparición de las juntas de conciliación y arbitraje. Los juicios laborales deberán atenderse en salas especializadas del Poder Judicial, aunque en el caso mexiquense, el Tribunal Superior de Justicia se encuentra profundamente cuestionado. Hacia ya debe transitar la justicia laboral.
Una más, se deberá crear un órgano autónomo responsable de otorgar registros a sindicatos independientes. Ya no más sindicatos únicos en donde predomina el corporativismo partidista. El gobernador en turno no tendrá injerencia. Y en conexión con el tema sindical, la democracia interna con voto libre, secreto y universal. Adiós a los liderazgos vitalicios y a las dirigencias dinásticas. Ojalá las reformas legales no sólo se procesen a la brevedad, sino que en verdad se apliquen.
Hubo prácticamente unanimidad en los temas de fondo. A nivel local, Morena y su mayoría deberán procesar reformas locales. El Estado de México cuenta con la mano de obra más numerosa del país. Aquí es también donde se localizan el mayor número de centros laborales sólo detrás de la Ciudad de México. Un amplio número de sindicatos, y por cierto, de los más numerosos; pero también de los más antidemocráticos, y que le apuestan al corporativismo.
La reforma es consecuencia además del Tratado de Libre Comercio entre México, Estados Unidos y Canadá. En el corto plazo, Horacio Duarte y Martha Hilda González deberían enfocarse a la precarización salarial. Es ahí donde se concentra el mayor problema de los trabajadores mexiquenses. Los niveles de desempleo se han abatido a cambio de sueldos muy bajos y condiciones laborales complejas. Tampoco todo puede concentrarse em programas económicos y asistenciales.
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Otra vez se ha soltado la rumorología en torno a cambios estructurales en el gabinete de Alfredo Del Mazo. Afortunadamente se atraviesa el periodo vacacional y eso calmará la insistencia por remover a sus piezas. Todo apunta que los ajustes de mandos medios podrían venir en las próximas semanas; pero con su gabinete se siente a gusto, al menos hasta que se cumpla su segundo informe. Así que la mayoría podrá descansar la semana entrante, y no precisamente con vacaciones permanentes.
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