Ayer surgió una cuenta falsa en twitter a nombre del Gobernador Enrique Peña Nieto, que sólo alcanzó a emitir 9 tweets –mensajes-, antes de que fuera desmentida por el propio mandatario mexiquense en su perfil de Facebook. No se trató de una guerra sucia, por el contrario, el apócrifo Peña Nieto subió a la red social mensajes acordes a las actividades y declaraciones que incluso realizó este miércoles a diversos medios de comunicación. En pocas horas, la cuenta pirata de Peña en twitter alcanzó superar los 400 seguidores, aunque se frenó ante el desmentido.
La cuenta que apareció como @EnriqueP_Nieto felicitó por su cumpleaños a Luis Videgaray, un hombre muy cercano a Enrique Peña; y también se congratuló –aunque desfasado en el tiempo- por la designación de Raúl Domínguez como presidente estatal del PRI. Algo que sí ocurrió en entrevista fue que el mandatario estatal emplazó al secretario de Hacienda, Ernesto Cordero a renunciar a su cargo si está en el ánimo de buscar la candidatura presidencial del PAN, y evitar un conflicto de intereses ante la crisis económica mundial que ya se enfrenta en México –esa declaración incluso fue retomada en la famosa cuenta twittera-.
La renuncia de Cordero –delfín del calderonismo- parece importarle a tres personajes clave en la sucesión presidencial de 2012. En primer lugar, al senador Santiago Creel quien ya se separó de su cargo hace algunas semanas. En segundo sitio, al propio Enrique Peña que está por dejar la gubernatura el próximo 15 de septiembre. Y en tercera posición, Josefina Vázquez Mota –quien rendirá su segundo informe de labores legislativas el próximo domingo, donde aprovechará para hacer de la convocatoria un destape- y se prevé que se separe al cargo legislativo antes de que inicie la discusión presupuestal en San Lázaro. Los tiempos se agotan, los plazos se cumplen.
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No hay que perder de vista, el recorrido de las reliquias de Juan Pablo II por la arquidiócesis de Toluca. Será un escenario ideal de proyección para el mandatario Enrique Peña, en la víspera de su entrega del poder, pero sobre todo un enjuague a modo para seguir ganando adeptos entre la jerarquía eclesiástica. Ya antes, fueron sus visitas a El Vaticano, su boda religiosa en noviembre del año pasado, su formación en la Universidad Panamericana –identificada con el Opus Dei- y para rematar la obra, pegar en un personaje de alta identificación para el catolicismo mexicano. Parece que las fichas de las coyunturas religiosas también se alinean con el mexiquense.
En contraparte, pudiera resaltarse el conflicto verbal, judicial e ideológico que ha sostenido en los últimos años Marcelo Ebrard con la clase religiosa –y en particular la católica- como consecuencia de su impulso a reformas progresistas como la interrupción legal del embarazo, y la legalización de los matrimonios entre personas del mismo sexo. En un país tan conservador como México, esas acciones y actitudes cuentan mucho, por eso Enrique Peña está tan pegado a la derecha.
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Ayer el personaje de twitter fue Luis Videgaray. Cumplió años, y la cargada twittera fue de felicitaciones para el ex dirigente estatal del PRI, quien está en una pausa de su trayectoria política. Se da por descartado su regreso a San Lázaro. Parece que su encomienda está destinada a pasar la charola entre los empresarios para apoyar la precampaña presidencial de Enrique Peña a partir de diciembre. Una chamba nada sencilla, pero muy rentable, que está libre de impuestos.
