Redacción
Distrito Federal. 10 de julio de 2015.- A pesar de la insistencia del gobierno de la República sobre la inexistencia de conflictos sociales para la construcción del nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en terrenos del Estado de México, este viernes pobladores de Texcoco y San Salvador Atenco solicitaron ante la Suprema Corte de Justicia (SCJN) ejercer su facultad de atracción para resolver un amparo que suspenda la edificación de dicha terminal aérea.
El pasado mes de enero, vecinos de ocho diferentes poblados de ambos municipios, promovieron un juicio de amparo ante el Juzgado Noveno de Distrito en Nezahualcóyotl, y aunque dicho proceso se encuentra en estudio, el órgano jurisdiccional rechazó conceder una suspensión para frenar el proyecto mientras se desahoga el juicio.
Un tribunal colegiado de circuito solicitó ante la Primera Sala de la Corte el recurso de revisión 177/2015 para que los ministros examinen si alguno de ellos está interesado en hacer suya la petición de los ejidatarios.
En caso de que la Corte decida no intervenir, el Segundo Tribunal Colegiado del Segundo Circuito, también con sede en Nezahualcóyotl, deberá pronunciarse al respecto y decidir si concede la suspensión.
Aunque inicialmente, en el mes de enero, el juez de distrito Jorge Arredondo Gallegos había desechado de inmediato la demanda de amparo por extemporánea; fue durante febrero cuando el tribunal colegiado resolvió que el amparo sí fue presentado en tiempo porque se impugnó la asignación de recursos para el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México en el Presupuesto de Egresos de 2015. El juez de distrito reexaminó la demanda y reconoció a los quejosos interés para acudir al amparo.
En la demanda, los pobladores de Atenco y Texcoco argumentan que el proyecto para el NAICM viola derechos humanos de no discriminación, consulta previa a las comunidades sobre obras públicas de infraestructura, acceso a un medio ambiente sano y al agua, vivienda digna e integridad personal, entre otros.
No obstante, las posibilidades de que este amparo sea concedido son reducidas ante los argumentos planteados de fondo, en tanto que las más de 4 mil 700 hectáreas donde será construido el Nuevo Aeropuerto en Texcoco son propiedad federal, es decir, no se expropiaron terrenos ejidales.
En caso de que existiera una suspensión, mientras se determina la procedencia del amparo, la decisión obligaría a frenar las obras del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, durante meses, o incluso más de un año, hasta en tanto haya una resolución definitiva.
El documento del juicio de amparo fue firmado por vecinos de San Salvador Atenco, San Francisco Acuexcomac, San Miguel Tocuila, San Felipe, San Luis Huexotla, San Cristóbal Nexquipayac, La Magdalena Panoaya y Zapotlán.
Esta semana, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes anunció un paquete de 21 acciones de infraestructura por 95 mil millones de pesos para el aeropuerto, cuya puesta en marcha está prevista para octubre de 2020.