Toluca, Edomex; 17 de enero de 2023.- Si alguien tuviera dudas sobre el curso que pudieran tener las campañas electorales, particularmente sobre el uso clientelar de los programas sociales para la promoción y movilización de votantes; bastaría con revisar la hoja de ruta de las candidatas punteras por la gubernatura que estará en disputa en los comicios del 4 de junio.
Delfina Gómez, fue al inicio del sexenio lopezobradorista, delegada del gobierno federal y responsable de arrancar la operación de los programas sociales destinados a adultos mayores; personas con discapacidad; estudiantes; entre otros. Por su parte, Alejandra del Moral, fungió entre febrero y octubre pasado, como titular de Desarrollo Social, y repartió miles de tarjetas del Salario rosa, acompañada por el gobernador, Del Mazo. Ahí, estará la clave de las preferencias electorales.
Entre enero y marzo, la estrategia gubernamental morenista y priísta se concentrará en intensificar el reparto de programas asistenciales para que la población objetivo determine el resultado de la elección del verano de 2023. En el gobierno federal, Ariadna Montiel, secretaria del Bienestar, ha tenido una mayor presencia en el Estado de México, con motivo de extender el programa de adultos mayores, a personas con 65 años cumplidos. Mientras que, la administración mexiquense, ahora tiene contemplado realizar hasta dos eventos por semana para el reparto de tarjetas del salario rosa. La batalla electoral no parece de votos, sino de entrega de dinero en grupos vulnerables.
Lucrar con la pobreza, en un Estado con más de 8 millones de personas con algún tipo de marginación, parece una buena estrategia en la disputa del poder público, y el convencimiento electoral. Ya lo dijeron en Palacio Nacional, es por estrategia política; aunque la acción es replicada hasta en la oposición.
Del lado de Morena, juega a su favor, Horacio Duarte, creador del programa Jóvenes Construyendo el Futuro. Es momento de capitalizar los apoyos monetarios para quienes votarán por primera vez por la gubernatura. Y también opera activamente, Juan Carlos González el delegado de los programas del Bienestar en la entidad; discípulo de Delfina, quien está volcado en la entrega de programas sociales para llegar a todo el estado.
Del lado priísta, el propio Eric Sevilla fue el creador del Salario Rosa, y responsable de su entrega durante tres largos años. También se han sumado Aidé Flores y Andrés Aguirre, con los padrones de Sedesem bajo el brazo. Y han reclutado recientemente a Mariano Camacho, operador de otro programa insignia en el sexenio, la entrega de miles de títulos de propiedad para familias en condición de pobreza.
Esos son los ingredientes de una elección cimentada en el clientelismo electoral; y en el que es difícil pensar que en el fondo, las políticas públicas buscan erradicar la pobreza, y parece que tienen como premisa fomentarla por beneficio político.
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