Toluca, Edomex. 31 de marzo de 2015.- En enero pasado, la representación del PRD ante el Instituto Nacional Electoral solicitó investigar al gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas por presuntas violaciones constitucionales, al acusarlo de una propaganda de su imagen, mediante inserciones de prensa tipo gacetillas en periódicos de circulación nacional, lo que supondría una conducta fuera de lo dispuesto por el Artículo 134 Constitucional que prohíbe a los gobernantes la promoción personal. En febrero pasado, la Comisión de Quejas y Denuncias del INE declaró improcedentes las medidas cautelares.
En paralelo, la semana pasada, el Consejo General del INE determinó que el gobernador Eruviel Ávila era culpable del uso indebido de propaganda para difundir su tercer informe de Gobierno fuera de la entidad y en periodo fuera de la ley. El procedimiento sancionador fue resultado de una denuncia presentada por Morena en contra de Ávila Villegas por diversas infracciones a la Ley electoral. La contienda jurisdiccional será más intensa que en otros procesos electorales.
Pese a ello, la entrega de dádivas sociales por parte de los gobiernos ha entrado en su etapa final previo a las campañas electorales. Los gobernantes han metido el acelerador, y ayer, Enrique Peña y Eruviel Ávila entregaron patrullas en la franja límite para regalar y difundir. A partir del próximo domingo inician las campañas proselitistas para diputados federales y se deberán sujetar a la denominada veda electoral.
Veinte días más tarde comenzarán las campañas para alcaldes y diputados locales, y entonces la veda será aún más estricta, bajo la vigilancia de los órganos electorales nacional y estatal. Faltan 70 días para los comicios, y los partidos políticos están en busca de judicializar desde ahora la inequitativa competencia en las urnas, a través de quienes violen la ley, ya sea por una intervención inadecuada de los gobiernos o el rebase de gastos de campaña de los candidatos.
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A pesar del descrédito por el que transita el gobierno de Enrique Peña Nieto y la pérdida de la confianza en su administración, el PRI se mantiene a la cabeza de las preferencias electorales. De acuerdo a la encuesta publicada ayer por el periódico Reforma, el priísmo alcanzaría una votación del 32 por ciento, seguido muy detrás por el PAN, con un 22 por ciento, que se colocaría como la segunda fuerza electoral. El PRI tiene garantizada ya la primera minoría en San Lázaro.
La gran debacle la registrará el PRD con un 14 por ciento de las preferencias electorales. La peor votación de los últimos 18 años para sus registros. En la carrera por conservar el registro de partido político, el Morena de Andrés Manuel López Obrador alcanzaría los 8 puntos de la votación, en un empate técnico con el Partido Verde y sus 7 puntos de preferencia. En el diagnóstico, las campañas electorales variarán muy poco las preferencias, y sólo incidirán para incentivar mayormente la participación ciudadana o viceversa, alentar el abstencionismo.
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