OFF THE RECORD 30-05-2024
Toluca; Edomex, 30 de
mayo de 2024.- Eruviel Ávila ha pretendido tomar notoriedad durante las últimas
horas. Acusó a Xóchitl Gálvez de haber solicitado su intervención para lograr
la liberación de su hermana, situación a la que se habría negado, a lo que
atribuyó una mala relación política y personal con la candidata presidencial
opositora. En su intención por llamar reflectores, Ávila recibió duras críticas
y cuestionamientos de Max Cortázar y Alejandro Moreno; pero cierto es que,
pocos pueden tomar seriedad o impacto en el exgobernador mexiquense hoy
inscrito en las filas del PVEM.
A diferencia de la
salida de Alejandra del Moral de las filas del PRI, que ha causado tanto revuelo
tanto de las filas priístas como de quienes le dan la bienvenida en la acera
morenista; cuando Eruviel renunció a su militancia tricolor pocos le lloraron,
y mucho menos le extrañaron. Mientras que, en el bloque oficialista, sólo fue
apapachado por Manuel Velasco, y nadie más. Es la fecha en que no existe
registro de un acercamiento personal con Claudia Sheinbaum. Su ascendencia
política poco o nada se le reconoce al ecatepense en su nueva casa.
Peor aún, todo hace
suponer que el mito electoral de Eruviel Ávila se topará con pared el domingo 2
de junio, cuando no alcance buenos dividendos en su natal Ecatepec. Mucho menos
en escenarios como Nezahualcóyotl, donde también tiene candidaturas propias
bajo las siglas del PVEM. Sus bonos políticos y personales irán a la baja y en
una franca crisis electorera. El grupo político que se llevó al Verde, tampoco
alcanzará las expectativas de cargos de elección. Y por su parte, José
Couttolenc se aferrará a defender sus resultados para no ceder con tanta
facilidad su franquicia partidista construida en los últimos años.
Cuando Eruviel Ávila
triunfó en las elecciones de la gubernatura alcanzó una cifra histórica de 3
millones de votos -derivado de una operación electoral instrumentada desde el sexenio
peñista-. Seis años después, cuando Ávila entregó la estafeta del poder, el PRI
apenas sumó 2 millones de sufragios. Es decir, durante el sexenio eruvielista,
el tricolor dilapidó un millón de votantes. Pero hay quien insiste en que el
gran culpable de la derrota priísta fue el sexenio delmacista. Fue el gobierno
de Ávila quien no supo o no quiso mantener los altos niveles de aceptación que
alguna vez lo llevaron a la cúspide del poder.
Desde entonces, el priísmo
estatal sucumbió en una de sus peores crisis electorales. En 2015 y 2017, retumbó
a niveles de votación que había dominado diez años antes, en 2005 y 2006, a
pesar del crecimiento en el padrón de electores. El PRI comandado por Carlos
Iriarte -acompañado por Erasto Martínez, Adrián Fuentes y Carlos Aguilar-, fue
perdiendo la potencia y cediendo bastiones a pasos agigantados. Fue ahí, donde
el PRI comenzó la pérdida de la gubernatura. Ávila era el responsable político como
primer priísta del estado.
En la víspera electoral,
Alejandra del Moral sigue siendo la nota mediática del Estado de México, y a
pesar de haber perdido la elección del año pasado, su salida ha tenido un mayor
impacto que las decisiones y declaraciones del exalcalde de Ecatepec. Lo que
son las cosas, Ávila empujaba con todo la postulación de Ana Lilia Herrera como
candidata a la gubernatura -lo hizo en el 2017 y también en el 2023-, pero hoy
la historia los ha separado irremediablemente, Eruviel se ha encontrado en la coincidencia
política con Del Moral, y la izcallense ya lo ha rebasado en el posicionamiento
al interior del proyecto presidencial de Claudia Sheinbaum.