Toluca, Edomex. 21 de diciembre de 2016.- El mercado de San Pablito en Tultepec es un centro simbólico de negligencia y omisión. En septiembre de 2005, el mayor mercado de pirotecnia en el Estado de México tuvo una explosión que conmocionó a comerciantes y causó daños materiales que se debieron atender con prontitud. Han pasado once años de aquel accidente, y parece que nada se ha corregido. Una nueva explosión ha dejado una tragedia mayor. Un total de 32 muertos y más de 70 heridos.
Las autoridades estatales con las justificaciones de siempre. Tultepec era una simple bomba de tiempo que explotó no sólo como un accidente sino como producto de una enorme irresponsabilidad. La pirotecnia es una actividad económica que otorga sustento a cientos de familias, pero que es permitida sin medidas de seguridad. La protección civil inoperante, en una oficina que parece diseñada para entregar cobijas cuando hace frío y reaccionar tardíamente cuando ocurren las desgracias.
Para la autoridad, lo inmediato es atender el costo político. La contención de daños se resuelve en lo mediático. En el manual de crisis, Eruviel Ávila y José Manzur en el sitio del desastre. Posan para la foto y atienden a las clientelas para reducir un problema social que colapsa entre las familias dañadas. Las respuestas que poco pondrán resolver en lo económico y lo material, pero que son irreversibles en las pérdidas humanas. Faltó mucha prevención, y prevaleció la negligencia institucional.
En medio de la tragedia, otra vez el oportunismo político. Diputados federales y locales; así como funcionarios federales, estatales y municipales que no hicieron su tarea a tiempo. Muy tarde aparecen en escena, pero aprovechan el momento para subirse a la tribuna, dar condolencias y promocionar su gestión social a quienes hoy padecen su inacción. Los intereses sectarios que todo lo partidizan, y lo convierten en un activo político para su beneficio personal.
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Este miércoles, la burocracia cierra la cortina del año 2016. En promedio, alrededor de 22 mil servidores públicos estatales saldrán de vacaciones por un periodo de doce días. En esencia, se trata del último lapso de descanso en la víspera electoral del año entrante. La definición de candidatos se dará en un lapso de 32 días. Para la elección del próximo gobernador faltan poco más de cinco meses.
Mañana jueves, todavía se desarrollará en Ecatepec la ceremonia por el 201 aniversario luctuoso de José María Morelos y Pavón. Pueden ocurrir los mensajes políticos dentro del gobierno y el partido en el poder para definir a su próximo candidato. Enrique Peña y Eruviel Ávila cerrarán el año en el simbólico Estado de México, un enclave electoral que representa el principal semillero electoral a favor del priísmo rumbo a la sucesión presidencial de 2018.
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