Toluca, Edomex; 19 de diciembre de 2022.- Los más de 300 integrantes del Consejo Político del PRI en el Estado de México aprobaron el convenio de alianza electoral con PAN y PRD, a ciegas; es muy probable que la coalición esté construida, que ya se tengan definidos los criterios y las condiciones para que los tres partidos políticos contiendan por la gubernatura en junio de 2023. Sin embargo, Enrique Martínez Orta sólo dijo que, la coalición electoral se sometía a votación a partir de un anexo; pero pocos saben el contenido del mismo.
Existe una alta probabilidad de que las élites priístas hayan doblegado no sólo a Ana Lilia Herrera; sino también al panista, Enrique Vargas para apoyar la candidatura de Alejandra del Moral. “Me sumo al reconocimiento, a quienes aspiraron, a Enrique Vargas del PAN, por apoyar y trabajar en la fortaleza de nuestra coalición”, enfatizó Alejandro Moreno en su discurso del viernes. En esa lógica, todo parece indicar que el acuerdo está sólido; y podría darse a conocer esta misma semana, para evitar un proceso interno en cada partido político.
Lo que es de reconocer, es la eficiencia con la que trabajan Enrique Martínez Orta y Aníbal González. Supuestamente, los acuerdos priístas, la semana pasada fueron designados al frente de dos comisiones especiales; y el viernes ya aprobaron por separado la coalición y la plataforma electoral. Aunque ambos documentos, sólo conocen un puñado de priístas; y ya fueron avalados por todos los consejeros a mano alzada, como las consultas que tanto critican, y que organizaba el presidente, López Obrador, en las asambleas morenistas.
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Alejandra no pudo tener la fotografía completa de su triunfo interno: Ana Lilia nunca sonrío; Ricardo Aguilar simplemente se ausentó; Ernesto Nemer al parecer no fue invitado; Laura Barrera fue sentada en una esquina; Carlos Iriarte vino porque se sintió arropado por Alito. Los más institucionales, Martha Hilda y Elías Rescala, arroparon, pero no alcanzaron a salir en la toma cerrada.
Y la gran incógnita fueron las ausencias de César Camacho y Eruviel Ávila. Ambos, impulsaron la contienda interna de Alejandra del Moral y Ana Lilia Herrera; y cuando se resolvió el conflicto partidista, prefirieron quedarse en casa. El abandono de sus discípulas no es una buena señal.
El que aparece en todas, y va a todas, es Arturo Montiel, quien busca erigirse como el gran jerarca del emblemático Grupo Atlacomulco y su clase política.
Pero la inasistencia que caló más hondo en el círculo delmoralista fue la del gobernador, Alfredo Del Mazo. A lo largo de su convocatoria, entre consejeros políticos y la militancia en general, el equipo de la izcallense presumió la presencia del primer priísta, y todos quedaron en espera de su arribo.
La especulación más creíble sostiene que, Del Mazo quiso evitar la fotografía con el defenestrado Alejandro Moreno; otra hipótesis apunta a que, existe un pacto de no agresión con el presidente López Obrador, para no intervenir en la elección del año entrante, y eso incluye, no incidir en eventos del partido o electorales.
Lo cierto es que, Alejandra no tuvo la concurrencia completa ni prometida.
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