OFF THE RECORD 17-01-2024
Toluca, Edomex, 17 de enero de 2024.- El tren México – Toluca debió terminar su construcción a finales del 2017. En las estimaciones más conservadores -entonces determinadas por Gerardo Ruiz Esparza- se tenía contemplada su inauguración por el presidente Enrique Peña Nieto y un recién inaugurado mandatario estatal, Alfredo Del Mazo Maza. Sin embargo, los sobreprecios, la mala planeación, la falta de permisos y la incapacidad, han prolongado su terminación. Un sexenio más tarde, todavía se tiene una obra inconclusa, que ayer colapsó en una parte del desarrollo de su construcción.
Con una corta memoria, algunos priístas fustigaron a los gobiernos morenistas -particularmente al de la CDMX, encargado de la obra- de poner en riesgo la integridad de la población. Pasan por alto que esta construcción fue iniciada el sexenio que ellos encabezaron; y que también se les derrumbó una ballena cuando avanza su construcción sobre avenida Las Torres casi esquina con Paseo Colón, a la altura de la Cama de Piedra. Para ser precisos, en mayo de 2016. Esa es la narrativa discursiva del priísmo para las campañas electorales de 2024, dándose balazos en el pie.
Para suerte de Delfina Gómez, ya no hay tramos pendientes de construir en el Estado de México. Incluso, un día antes de entrar en funciones, se inauguró el tren en su trayecto de Zinacantepec a Lerma. La presión política avanza en contra de Martí Batres, pues la promesa presidencial era que el recorrido de Zinacantepec a Observatorio quedara inaugurada en el mes de marzo; y fuera una buena carta de presentación en plena campaña electoral a favor de Claudia Sheinbaum. Aún con los trabajos a marchas forzadas de las últimas semanas, no hay certeza de que esta condición pueda resolverse y cumplirse en la fecha antes pactada.
El tren México – Toluca es solamente la continuación de una obra mal planeada desde hace diez años. Y el accidente ocurrido ayer en la Ciudad de México, fue consecuencia de un gobierno que ejecutó a destiempo y con un alto precio económico y político su obra magna; y que en una continuidad de incapacidad, no ha logrado terminar el actual sexenio en largos seis años.
Y muy a pesar de la mala experiencia que ha dejado el Tren México – Toluca, el gobierno federal insiste en extender la red ferroviaria de pasajeros. En el Estado de México, se impulsaría en el mediano plazo el tren México – Querétaro, cuya ruta fue cancelada en el sexenio peñista tras el escándalo de la Casa Blanca; además del recorrido del AIFA hacia Pachuca y Tula, para abarcar hacia municipios del nororiente mexiquense. Pero más vale no ilusionarse, porque eso podría llevar muchos, pero muchos años más.