Toluca, Edomex. 10 de abril de 2015.- Los excesos del gabinete peñista ha obligado al sacrificio de dos de sus más cercanos colaboradores: Humberto Benítez Treviño y David Korenfeld Federman. El primero marcado por la soberbia de su parentela debió dimitir al cargo como titular de la Profeco, mientras que el segundo obcecado en el ejercicio del poder abuso de su puesto, debió renunciar a la Conagua tras usar un helicóptero oficial para fines personales. En ambos casos, hay que decirlo, prevalece la impunidad y sólo fueron “castigados” ante la opinión pública siendo cesados.
Humberto Benítez acompañó a Peña Nieto como secretario general de gobierno de su gubernatura entre 2005 y 2009. De 2009 en adelante, fue un alfil de mediano peso en la legislatura federal, en la cual presidió la Comisión de Justicia en San Lázaro. Ya en el poder que otorgan Los Pinos, el exprocurador general de la república fue nombrado titular de la Profeco, pero echado por la puerta de atrás por la impericia de su hija, que encaprichada ordenó cerrar un restaurant en el Distrito Federal, por negarle una mesa que exigía con ahínco. Benítez fue rescatado por Eruviel Ávila como director del Colegio Mexiquense y también como presidente de la Fundación Uaemex.
David Korenfeld, experimentó junto con Enrique Peña, una aventura electoral en 2003. Mientras Enrique era electo diputado local, David se convirtió en alcalde de Huixquilucan. En 2006, Korenfeld salió derrotado de una diputación local. Peña lo rescató y lo hizo secretario del Agua, de 2006 a 2011. Korenfeld acumuló poder, al instalar posiciones al frente de la Secretaría de Salud, la Procuraduría de Justicia y el Instituto Mexiquense del Emprendedor. Con el ascenso al poder, Enrique llevó a David a la Conagua. Hoy es un cadáver político que deberá esperar que las cosas se enfríen, para posiblemente ser rescatado por Eruviel y el gabinete mexiquense.
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Para detener la ola de rumores y albazos que lanzan los equipos de Ruth Olvera y Marco Antonio Rodríguez sobre la definición del candidato del PRD a la alcaldía de Tlalnepantla, los Comités Nacional y Estatal del PRD emitieron un comunicado conjunto, donde se informa que la semana entrante habrá definición en las candidaturas de Tlalnepantla, Teotihuacán y Tultitlán, en las que prevalece la incertidumbre. La definición de estos candidatos han producido dolores de cabeza a la dirigencia de Nueva Izquierda en la entidad por lograr consenso y unidad.
Nueva Izquierda reclutó a Ruth Olvera y Tony Rodríguez, pero a ambos les ofreció la candidatura a la alcaldía, que ambos ya ocuparon abanderados por el PAN. Ruth había aceptado cederle a Tony la presidencia municipal a cambio de ir por la diputación local. Sin embargo, las encuestas favorecen a Ruth por encima de Tony, lo que ha dado un giro a la toma de decisiones. Olvera ha amenazado que no aceptará otra cosa que no sea la postulación por la alcaldía, derivado de su posicionamiento electoral.
En el PRD, sin embargo, estima que con Tony Rodríguez como candidato a alcalde de Tlalnepantla, sus preferencias podrían crecer aún más en campaña, en tanto que podría atraer los votos de priístas, particularmente los resentidos.
Mientras que en Tultitlán, el líder de Nueva Izquierda, Javier Salinas ya había comprometido la candidatura para Porfirio Ramírez, exsecretario particular del contralor del gobierno del Distrito Federal, sin embargo, los perredistas locales advierten su falta de trabajo político y social en la región. Inclusive, el otro contendiente, César Hernández sale mejor evaluado que el exfuncionario del gobierno capitalino.
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