Redacción
Toluca, Edomex 1 de junio del 2023.-. Una veintena de mujeres, entre madres, esposas e hijas de personas que se encuentran “injustamente presos” en los penales mexiquenses, se encadenaron este jueves en las vallas metálicas que la policía del estado instaló a unos metros de los accesos principales a Palacio de Gobierno.
Las mujeres que forman parte del colectivo Haz Valer mi Libertad, llevan meses solicitando audiencia con el gobernador Alfredo del Mazo y con diputados mexiquenses para que sus familiares sean beneficiarios de la ley de amnistía, pues consideran que su encarcelamiento ha sido ilegal, pues muchos sostienen que los tienen encarcelados con pruebas falsas o fabricadas.
Las mujeres demandaron al gobernador el estado las reciba, como recibe a empresarios y otros sectores de la sociedad y le pidieron ser empático con estas causas pues a su decir, se ha comprobado que en los casos de sus familiares se han violentado los derechos humanos.
“Estamos a las afueras del Palacio de Gobierno encadenadas exigiendo un diálogo con el gobernador, exigiéndole que nos dé la cara, porque nosotros a él sí le hemos mostrado nuestro rostro y el rostro de nuestros inocentes, porque ellos son inocentes y no tenemos nada que ocultar”, dijo Iris Placido, hermana de Daniel Placido injustamente acusado de secuestro.
Las mujeres manifestaron que llevan más de 3 años en lucha pidiendo por la libertad de sus presos y más de seis meses solicitándole audiencia al gobernador para que escuche los casos de sus familiares y como han sido víctimas de todo el sistema de justicia mexiquenses.
“El llamado de las madres, de las esposas, de las hermanas, de los injustamente presos es claro, queremos hablar con usted porque el gobierno nos ha venido ignorando, su gobierno nos ha venido ignorando. Pero también otras instituciones, como el Poder Legislativo y el Poder Judicial, ya que a pesar de que existen mesas de diálogo, no se reflejan avances y hasta ahora, los presos siguen presos injustamente pagando delitos que no cometieron”, insistió.
Mientras las mujeres se encadenaban, un contingente de policías antimotines reforzaron la vigilancia en el acceso principal del Palacio de Gobierno, y un grupo de uniformados con escudos se colocó justo detrás de la vallas metálicas para impedir que las mujeres pudieran generar algún inconveniente con los asistentes a la sede del Poder Ejecutivo estatal.
