Redacción
Lerma, Edomex. 25 de junio de 2015.- Pobladores de la comunidad de San Francisco Xochicuautla, de este municipio mexiquense, instalaron hoy un campamento de “Digna Resistencia” en el Bosque de Agua situado en la parte alta de la localidad, para impedir que la constructora Autovan S. A de C. V. continúe los trabajos de edificación de la autopista Naucalpan –Toluca, a la que ellos se oponen por el daño ecológico que esta vialidad representaría.
Desde hace una semana, la constructora propiedad de Juan Armando Hinojosa -uno de los contratistas predilectos del presidente Enrique Peña- ha enviado a la zona maquinaria pesada para abrir los terrenos por donde se pretende pase el trazo de la autopista que unirá la zona poniente del valle de México con el aeropuerto internacional de Toluca.
Sin embargo, los comuneros de Xochicuautla reclaman que cuentan con un amparo concedido por la justicia federal que impide que se realicen trabajos en esa zona boscosa, hasta que no se reponga la Asamblea Comunal y se apruebe la edificación de esta vía por los terrenos de Xochicuautla.
Los pobladores de esta comunidad señalan que la autopista sólo es punta de lanza para urbanizar toda esa región boscosa que actualmente resulta fundamental para la recarga del acuífero del Lerma, que dota de agua al Distrito Federal.
La resolución del juez de distrito en materia de amparo consideró que la primera asamblea comunal realizada en 2013, donde la mayoría de los comuneros votó a favor de permitir la construccion de la autopista fue ilegal, por lo que debe ser repuesta.
En tanto no haya una nueva autorización del pueblo, dice la resolución judicial, no se podrán continuar los trabajos de construcción de esta autopista en ningún tramo que abarque la comunidad de San Francisco Xochicuautla.
“Ya les enseñamos el amparo, les hemos pedido de la mejor forma que se retiren y que no violenten la ley, pero no hacen caso, siguen trabajando, tirando arboles y abriendo brechas para el trazo de la carretera”, dijo uno de los comuneros.
Los trabajos de la constructora son resguardados por policías estatales que a la menor provocación de los comuneros piden refuerzos del grupo antimotines para impedir que no obstruyan el avance de la obra.
“Como no nos hacen caso, decidimos instalar un campamento en la zona para evitar que los trabajos continúen. Si insisten en avanzar, las maquinaria tendrá que pasar sobre nosotros, pero no vamos a permitir que sigan trabajando en Xochicuautla, cuando hay una resolución judicial que nos ampara”, dijo otro de los labriegos que hoy se quedó de guardia en el campamento.
Los comuneros de Xochicuautla han responsabilizado al gobierno de Eruviel Ávila de cualquier agresión o enfrentamiento entre los pobladores de la localidad y trabajadores de la constructora o policías.
“La gente está muy molesta y es entendible. Lo único que hacen es defender sus derechos y sus tierras, y ahora están dispuestos a todo para que ya no avance más la maquinaria. Si avanzan será sobre nosotros”, advirtió Pedro, uno de los labriegos de la región.
La autopista Naucalpan-Toluca es ya una prioridad de las autoridades para poder reactivar el aeropuerto de Toluca, por lo que han reiterado que esta obra no se cancelará ni modificará como demandan los labriegos, pero tampoco se hará nada que atente contra ellos.
