Redacción
Distrito Federal, 16 de abril de 2015.- El secretario General de Gobierno, José Manzur Quiroga, reveló, ante diputados federales, que las autoridades mexiquenses llegaron seis horas después de ocurrida la matanza de 22 personas en una bodega de San Pedro Limón, Tlatlaya, el pasado 30 de junio, pues así se lo sugirió quien era el comandante de la 22 Zona Militar, José Luis Sánchez León, con el argumento de evitar que el personal de la Procuraduría General de Justicia de la entidad corriera algún riesgo de toparse con integrantes del grupo del crimen organizado en la carretera.
El funcionario compareció hoy ante la comisión legislativa de derechos humanos de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, como parte de las investigaciones que realizan los legisladores para conocer lo que realmente ocurrió la madrugada de aquel 30 de junio, donde personal militar acribilló a 22 jóvenes, presuntos integrantes del crimen organizado.
Manzur confesó que en cuanto las autoridades mexiquenses conocieron de los hechos -ocurridos alrededor de las seis de la mañana- sostuvieron comunicación con el comandante de la 22 zona militar en Toluca, quien les recomendó esperar para enviar al personal de la Procuraduría para dar fe de los hechos y encargarse del levantamiento de los cadáveres.
“Me volví a comunicar con el general (Sánchez León) y nos dijo que no fuera muy rápido el personal de la Procuraduría porque todavía estaba más o menos obscuro. Que había por ahí alguna posibilidad de que hubiese más personas en el trayecto de Toluca hacía Tlatlaya y que pudieran tener algún riesgo el personal de la procuraduría”, dijo.
Manzur, quien acudió en representación del gobernador Eruviel Ávila, a quien habían citado los diputados a que compareciera, recalcó que el gobierno mexiquense sigue en proceso de cumplir los ocho puntos de la recomendación que emitió la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, por las graves violaciones a las garantías individuales que se cometieron en el operativo militar.
Indicó que ya existe una investigación en contra de personal de la Procuraduría mexiquense para deslindar responsabilidades y castigar a quienes cometieron abusos en contra de las mujeres que fueron rescatadas en la bodega de San Pedro Limón.
Ante los cuestionamientos de los diputados federales sobre el reconocimiento que hizo el gobernador Eruviel Ávila al Ejército un día después de los acontecimientos, Manzur respondió que efectivamente se hizo una felicitación pero por el rescate que se hizo de las mujeres y no por haber acribillado a los jóvenes que ya se habían rendido tras un enfrentamiento contra soldados.
