Redacción
Toluca, Edomex. 21 de marzo de 2019.- Empresarios del transporte público concesionado amagaron este jueves a autoridades estatales con implementar un nuevo aumento a las tarifas del pasaje, de 10 a 14 pesos, en las rutas de pasajeros del Valle de Toluca, como una medida que permita solventar los incrementos inflacionarios que han enfrentado durante los últimos años y hacer de su negocio una condición rentable para la operatividad del sector.
En conferencia de medios, los representantes de 28 líneas del transporte público advirtieron, que a pesar de una solicitud permanente a la Secretaría de Movilidad de la entidad, no se ha tenido una respuesta favorable, por lo que en caso de no ser atendidos deberán aplicar el incremento sin autorización, o en caso de ser necesario dejar de circular en determinados horarios y rutas.
Rolando Álvarez Caballero, líder de los transportistas, explicó que en un estudio realizado en coordinación con el Instituto del Transporte del Estado de México, se establecieron diversas consideraciones para implementar el incremento a la tarifa, entre las que destacan gastos de operación y pérdidas, así como el aumento en el costo del diésel.
En promedio, diariamente cada unidad de transporte público da servicio a alrededor de 310 personas, lo que representan ingresos por 3 mil 100 pesos, en cuyos recorridos se consumen 100 litros diarios de diésel, es decir, cerca de 2 mil 230 pesos a diésel, sin contar el financiamiento para comprar las unidades. Estimaron que sus pérdidas mensuales alcanzan hasta 13 mil 250 pesos.
Alejandro Hernández, uno de los líderes del transporte público, afirmó que no se trata de afectar la economía de los usuarios, pero las condiciones actuales de los concesionarios obligan a tomar medidas apremiantes.
Los transportistas urgieron a sostener una mesa de diálogo, en un plazo no mayor a una semana, o bien, advirtieron que con o sin su autorización, implementarán el costo a 14 pesos.
El más reciente aumento a las tarifas del transporte público se registró en septiembre de 2017, hace menos de dos años, en la víspera del fin de sexenio del entonces gobernador Eruviel Ávila Villegas, quien autorizó que la tarifa pasara de 8 a 10 pesos.
