Redacción

Toluca, Edomex, 23 de marzo del 2024.- Diversas organizaciones en el mundo advierten sobre la urgencia de realizar acciones de cuidado y consumo de agua, de lo contrario, el problema de la escasez se agudizará aún más. Ante esta situación, la lluvia se presenta como una alternativa sustentable para nuestros hogares, sobre todo en zonas geográficas donde hay pocos mantos acuíferos o no son seguros en su composición.

En este tenor, los investigadores de la Universidad Autónoma de Guerrero, Blanca Itzany Rivera Vázquez, Juan Manuel Esquivel Martínez y Edith Rosalba Salcedo Sánchez, comparten los resultados de un proyecto de investigación en su texto “Captación de agua de lluvia en Taxco, modelo para zonas mineras”, publicado en la revista Universitaria de la UAEMex.

El estudio es parte de las actividades de la Maestría en Recursos Naturales y Ecología, donde se identificaron los mejores sitios para instalar sistemas de captación de agua de lluvia (SCALL), pues los cuerpos acuíferos de ese municipio contienen metales pesados y tóxicos (plomo, mercurio, arsénico, cadmio y otros), que si se ingieren causan problemas en la salud:  diarrea, daño renal, problemas neurológicos y cáncer.

Los expertos refieren que, según el Instituto Mexicano para la Competitividad, 10 millones de personas no cuentan con servicio de agua ni saneamiento, por una distribución desigual de los recursos, deforestación, explotación intensiva de los acuíferos o contaminación de estos en fuentes superficiales y subterráneas.

Una vez considerada la geografía de Taxco, los investigadores crearon un mapa con siete sitios prioritarios para instalar los scall de tipo rural o urbano. Además, se analizó la calidad del agua de lluvia y se demostró que es adecuada para actividades domésticas de limpieza, lavado de ropa, uso sanitario y riego.

Los autores, que también cuentan con estudios en Ciencias del Agua por el Instituto Interamericano de Tecnología y Ciencias del Agua (ittca) de la Universidad Autónoma del Estado de México, concluyen que esta investigación geotecnológica es una herramienta innovadora en la gestión sostenible de los recursos hídricos y que, además, sirve para buscar sitios óptimos donde captar la lluvia y generar una cultura de reúso y aprovechamiento frente a la escasez.

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