Por Juan Carlos Cartagena Abaurre
Poco espectáculo ofrecieron Toluca y León en el Nemesio Diez. Los Diablos tiraron una vez a gol y son merecedores de su séptimo juego sin ganar. León nunca se atrevió a ser la fiera que llegamos a conocer y se conformó con sacar un punto del infierno de Toluca. Nadie ofreció más, nadie se atrevió, ninguno quiso arriesgar y terminaron dividiendo puntos.
El 11 del Rojo
Cristante optó por alguien de más marca con Jorge Rodríguez y le dio resultado. El DT mandó a Gus, Dedos, Vanegas, Haret, Rodriguez, Baeza, Gallo, Kevin, Rubens, Canelo e Ian.
La clave
Dos equipos que tenían miedo de perder. Hay dos jugadas polémicas que pudieron ser sancionadas como penal. La de Gus Gutiérrez, donde para suerte de Toluca, el balón da en el guante antes que haya contacto con Colombatto; la otra, un jalón sobre Kevin, que ni el VAR revisó.
El ingreso de “Puma” Chávez supuso mayor velocidad en el ataque directo, sin embargo, la lesión de Canelo volvió a modificar la dinámica en ofensiva y se acabaron los minutos de “ilusión” por algo de emoción.
Ojo ahí
Cuando Toluca no tiene jugadas a balón parado baja un 75% su producción ofensiva y peligro. Hoy León hizo solamente 5 faltas y con ello anuló la ofensiva en jugadas pre fabricadas. Toluca sigue sin claridad ofensiva.
Oooootro lesionado
Siguen los problemas musculares en jugadores rojos. Canelo des del el primer tiempo me pareció acusar un problema muscular, mismo que detonó en el complemento. Veremos mañana cuando tiempo se pierde el delantero. Incluso, lo mejor sería que no jugara contra Puebla.
Conclusión
Poco que decir, que no se hay dicho en los últimos seis juegos. No me gusta Toluca y con todo ello debo aceptar que no lo podemos descartar, en un torneo distinguido por la mediocridad, más que la paridad, de sus competidores.
Eso sí, hay conclusiones por sacar, sobre todo con la lentitud en ataque, algo que genera que el equipo se haga previsible. Al igual que el torneo pasado, Toluca va cerrar con, a lo mucho, un triunfo en ocho partidos, y es preocupante que se crea que “no debe haber presión”. Un equipo con un solo tiro a gol en 90 minutos no puede aspirar a ser campeón; es más, hoy en día tampoco sería garantía jugar en casa porque se suman 4 juegos sin ganar en el Nemesio Diez, razón del desplome de un equipo que llegó a pelear el liderato y podría terminar abajo del lugar 5. Este día no fue par de roscas, sino de ojaldras que no dieron mucho espectáculo y empataron sin goles y sin grandes emociones.
Gracias por leerme y jugar conmigo.