Toluca, Edomex. 25 de abril de 2016.- Carlos Iriarte Mercado ha iniciado una campaña al interior de PRI del Estado de México con la idea de recuperar la historia gráfica y documental del priísmo mexiquense. En esencia, lo que en principio simula una genuina idea por construir identidad entre la militancia, parece asestar un duro golpe a Alfredo del Mazo Maza, bajo la idea de que Iriarte es un militante que ha recorrido todos los cargos posibles en su legítima aspiración por la gubernatura, tan legítima como la de Alfredo, que creció en la cuna del poder político.
Enfrente, Alfredo ya impulsa una precampaña apegada a las emociones. En redes difunde frases motivacionales acompañadas de fotografías posadas con diversos sectores sociales para hacer clic. Inusitadamente, el heredero de la dinastía Del Mazo ha resultado un fan del futbol, e incluso hincha de los Diablos Rojos del Toluca. Que nadie se sorprenda si un buen día Alfredo aparece en la Bombonera, donde en sus 10 años de carrera política nunca se le ha visto.
A quien no hay que perder de vista es a Carolina Monroy, pues a pesar de que se ha alejado del Estado de México, cada fin de semana aparece en dos o tres campañas de las gubernaturas en disputa. Carolina apuesta a tejer arriba para amarrar abajo. En su calidad de secretaria general del PRI nacional, tiene su mira en arrojar buenos resultados en las elecciones como carta de presentación para su ungimiento. Pese a su fallido destape no debe descartarse.
El PRI mexiquense ha comenzado a calentar motores. La efervescencia se ha comenzado a sentir entre los grupos internos de los precandidatos. El fuego amigo determinará que otros aspirantes suban al tren de la contienda. Algunos de los jugadores hoy visibles deberán bajar en el transcurso. Hay que cuidar incluso la posibilidad de que el gabinete de Eruviel sufra más cambios, para subir a otros tiradores como aspirantes a la silla principal de Lerdo 300.
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Oscar González Yáñez, el cacique del Partido del Trabajo en el Estado de México, anunciará este lunes -lo que hizo ya en 2005 y 2011-, que buscará ser candidato a gobernador. La estrategia le resultó favorable en las contiendas pasadas para vender su franquicia partidista al mejor postor. En las últimas dos elecciones hizo alianza con el PRD, acompañando a Yeidckol Polvensky y Alejandro Encinas. Oscar incurrirá además en un acto anticipado de campaña y por ende, debería ser sancionado de acuerdo con la legislación electoral.
En ambas ocasiones, Oscar se acercó a López Obrador para poner a su servicio su mini partido. Hoy los afectos de Andrés Manuel están muy lejanos de las acciones de González Yáñez. Para 2017, se advierte que Morena contenderá en solitario. El año pasado Oscar decidió coaligarse con el PAN. Las opciones de alianza para el PT parecen colapsar y competir solo sería un suicidio político. De algo pueden estar seguros los petistas, la única y última definición será de González Yáñez, dueño y tomador de decisiones del PT mexiquense.
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