Redacción
Ciudad de México, 13 de abril del 2016.- El gobierno de Eruviel Ávila se comprometió esta tarde con los comuneros de Xochicuautla a detener las obras de la autopista Naucalpan-Toluca, que en días pasados generaron confrontación entre los pobladores de esta localidad de la parte alta del Lerma con policías y personal de la constructora Autovan, propiedad de Juan Armando Hinojosa, un empresario muy cercano al presidente Enrique Peña Nieto.
En la Secretaría de Gobernación se pactó –además del retiro de la policía de la localidad– la idea de explorar un trazo alternativo a la autopista que no afecte ni a la comunidad ni al bosque sagrado Otomí-Mexica, donde se recarga el acuífero del Lerma.
Comuneros de Xochicuautla y representantes del gobierno mexiquense acudieron a Palacio de Covián, en Bucareli para instalar una mesa de negociación, donde el gobierno federal y activistas de derechos humanos fungieron como testigos. La primera condición de los comuneros para sentarse a la mesa fue parar el asedio de policías en Xochicuautla y suspender la obras que amenazaban con tirar más viviendas en la parte alta de la comunidad para dar paso a la carretera.
Cumplida esta condición arrancó el diálogo que se extendió por horas. En uno de los salones de la Secretaría de Gobernación se firmó la minuta donde el gobierno se compromete a retirar a toda la policía del estado de Xochicuautla y a no hacer más obras de la autopista, hasta encontrar una solución al conflicto.
También se firmó el acuerdo para buscar un trazo alternativo a la autopista que deje contentos a todos. Los comuneros se comprometieron a presentar una propuesta en este punto y el gobierno a explorar dos trazos más que se incluyeron en el expediente cuando solicitaron el dictamen de impacto ambiental a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales.
También se acordó el resarcimiento del daño ocasionado por el derribo de la casa del delegado de Xochicuautla Armando García Salazar y la búsqueda de un sitio digno para que vivir dentro de la comunidad. Aunque el gobierno se mostró dispuesto a pagar de manera inmediata por el daño, García Salazar prefirió hacer un avalúo serio y cuantificar claramente todo lo que perdió el lunes pasado, cuando maquinaria de Autovan, destruyó su casa ubicada en el paraje del Zopilote, en la parte alta de la comunidad.
CNDH emite medidas cautelares
También esta tarde, la Comisión Nacional de Derechos Humanos emitió medidas cautelares para la protección de los habitantes de Xochicuautla.
En el documento que se turnó al gobierno mexiquense, se solicita el retiro inmediato de la policía y la detención de las obras de la autopista hasta en tanto se dicte una sentencia final en los juicios de amparo que se promovieron contra el decreto expropiatorio.