Toluca, Edomex. 21 de marzo de 2016.- No sólo en el PRI ha comenzado la carrera sucesoria por la gubernatura mexiquense. Mientras en el partido en el poder ya se barajean nombres de aspirantes, en el PAN del Estado de México y la corriente Nueva Izquierda del PRD, han iniciado a explorar la definición de una alianza opositora, pero como elemento indispensable, ha arrancado la búsqueda de ciudadanos reconocidos que puedan volverse en los candidatos a gobernador, y eventuales sucesores de Eruviel Ávila.
En las últimas semanas, se han reunido al menos en cuatro ocasiones, el dirigente estatal del PAN, Óscar Sánchez Juárez con el líder de Nueva Izquierda, Javier Salinas Narváez. Como resultado de esos primeros encuentros, también han acordado invitar a esta alianza a otros partidos como el PT y Movimiento Ciudadano para conformar una amplia coalición opositora. A pesar de la formalidad de perfilar la alianza opositora, la postura asumida por Salinas no puede considerarse como parte de la dirigencia estatal perredista.
Desde hace meses, Javier Salinas actúa al margen de la toma de decisiones de la dirigencia estatal del PRD. En la legislatura mexiquense tampoco se alinea a los acuerdos del grupo parlamentario que coordina Juan Zepeda, quien de manera individual ha decidido dejar el bajo perfil para empezar a placearse como un aspirante serio a la candidatura del PRD al gobierno del Estado de México. En al fondo, la condición para una alianza opositora sería esencial que el candidato no perteneciera ni al PAN ni al PRD.
En el oportunismo político que le caracteriza, Javier Salinas ha rebautizado su grupo al interior del PRD. Atrás dejó el lema de “Mejores Cuentas”, para ahora utilizar la leyenda “Pensemos en el Futuro”, aderezado con un logo en el que se hace uso del sol azteca y de los colores emblemáticos del PAN, PT, Movimiento Ciudadano y hasta Nueva Alianza. La contienda por la gubernatura se encuentra en acción, y desde la oposición han comenzado su propio juego.
—————-
Por medio de una negociación directa entre Miguel Ángel Mancera y Luis Videgaray, se reactivó la ampliación de la Línea A del Metro que correrá de Los Reyes La Paz hasta Chalco. La operación política del jefe de gobierno capitalino desplazó al gobernador Eruviel Ávila. El proyecto ejecutivo de la ampliación del Metro se había cancelado tras el recorte presupuestal anunciado a principios de año. Mancera confío que con la reactivación del proyecto, la ampliación del Metro pueda concretarse en lo que resta del sexenio peñista.
De los 2 mil 500 millones de pesos que costaría la ampliación del Metro, Mancera y Videgaray acordaron destinar 250 millones de pesos para el presente año, que servirá apenas para el proyecto ejecutivo del mismo. El resto, un presupuesto cercano a los 2 mil 250 millones de pesos, podrían asignarse en los años 2017 y 2018, para ser inaugurado por Peña Nieto y Mancera al final de su sexenio… aunque en el Estado de México ya habría un gobernador distinto a Eruviel.
Comentarios a contacto@www.planamayor.com.mx