Toluca, Edomex. 31 de agosto de 2015.- Los ajustes al gabinete peñista consolidaron el liderazgo de Luis Videgaray como factor clave en la toma de decisiones. Su margen de maniobra es determinante en el rumbo que asumirá el gobierno para la segunda etapa de la administración. En la acera de enfrente, Manlio Fabio Beltrones, se encuentra encumbrado en el poder que otorga la dirigencia nacional priísta. Si la competencia por la candidatura presidencial estuviera en su recta final, Videgaray y Beltrones entrarían en una suerte de valoración sobre el mejor candidato para la sucesión de 2018. Osorio, Meade y Nuño parten de más atrás, donde los dos últimos son alfiles del propio Videgaray.
Desde ahora, se advierte que existe un acuerdo no escrito, para que Videgaray y Beltrones, de forma colegiada definan las prioridades del gobierno y del PRI, que les permita consolidar su proyecto de gobierno. Al final, los dos se enfrentarán entre sí por la candidatura presidencial, pero por ahora comparten un proyecto común, que es afrontar los desafíos económicos, políticos y electorales de los próximos dos años. En esta circunstancia, la sucesión de la gubernatura mexiquense parece clave para sus propias aspiraciones.
Bajo esta hipótesis, el secretario de Hacienda y el dirigente nacional del PRI serán los enclaves que incidirán en la definición de candidaturas a las 11 gubernaturas en disputa el año entrante. Videgaray y Beltrones buscarán por separado fortalecer sus grupos políticos para encaminarse en la ruta sucesoria. En sus manos estará la definición de candidatos a las gubernaturas por renovar, y que en el caso particular de Estado de México, donde se advierten acciones u omisiones anticipadas a casi dos años de la elección, el equipo de Videgaray tendría en Alfredo del Mazo una de sus principales resistencias en la definición.
No obstante, el delmacismo parece vivir un momento político de cúspide. Alfredo del Mazo Maza está convertido en coordinador de los priístas mexiquenses en San Lázaro. Su prima Carolina Monroy fue electa secretara general del PRI. El alfil inseparable, Ruiz Esparza sobrevivió a los ajustes del gabinete al frente de la SCT. Miguel Basáñez será ratificado como embajador de México en Estado de Unidos. Y su aliado político histórico, Enrique de la Madrid -hijo del expresidente Miguel de la Madrid- se apoderó de la secretaría de Turismo. Viven un auge.
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A pesar de que Pedro Zenteno, líder del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en el Estado de México, fue suspendido de sus derechos políticos por un año derivado de no acatar una resolución de la comisión de honestidad, se sigue ostentando como presidente estatal de dicho partido político. Hace más de un año se le emplazó a definir el comité municipal de Ecatepec, cosa que nunca realizó y lo terminó por defenestrar. El poder de Zenteno parece intacto.
Desde el pasado viernes, Zenteno acompaña a José Ramón López -hijo de Andrés Manuel López Obrador- en reuniones de organización rumbo a los comicios locales de 2017. El líder de Morena se asume como presidente del partido, y nadie le dice nada, ni siquiera el hijo de la honestidad valiente. Su periodo como presidente estatal concluye en octubre próximo, cuando el Morena deberá renovar su dirigencia en el Estado de México.
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