Toluca, Edomex. 27 de agosto de 2015.- La eventual salida de Carlos Iriarte Mercado, como dirigente estatal del PRI, está relacionada con una renovación escalonada de toda la estructura priísta nacional, prevista por el presidente nacional priísta Manlio Fabio Beltrones. Iriarte se iría de la silla tricolor no por castigo sino por una obligada rotación que rebasa incluso a las decisiones del gobernador Eruviel Ávila. Sin embargo, es una buena oportunidad para que el mandatario estatal coloque en esa posición de privilegio a uno de los suyos, de sus más cercanos.
Iriarte se convertirá en diputado federal a partir del próximo 1° de septiembre, en cuya labor apostará a convertirse en uno de los enclaves mexiquenses de trascendencia en la legislatura, para acompañar al chuayfettista, César Camacho; y a los delmacistas, Alfredo del Mazo y Carolina Monroy. En las próximas semanas, vendrá una intensa negociación por ocupar las comisiones legislativas. Los mexiquenses podrían apostar por las de Presupuesto, Comunicaciones, Justicia, y algunas otras, en donde Carlos buscará alguna posición para su causa.
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Víctor Legorreta expuso su novatez. El funcionario de la Secretaría de Movildad incumplió su trato con integrantes de la agrupación “Metrobús Toluca YA”, quien había acordado acompañar a los jóvenes de dicha asociación para realizar un recorrido por un autobús del transporte público. La intención era corroborar las condiciones en que operan algunas rutas del servicio de pasajeros. La cita era ayer miércoles, pero Legorreta no se presentó a la propia agenda que él había aceptado 24 horas antes. No tuvo el cálculo político suficiente para caer en una circunstancia que no iba a completar.
La razón por la que Legorreta no acudió, era que no tenía el permiso de su patrón, Isidro Pastor, secretario de Movilidad en la entidad. El nuevo compromiso del director de movilidad es que reprogramará su cita, una vez que planee -por no decir que arreglará-, las fechas, las rutas y horarios. Ojalá el ejercicio sea un acto genuino que permita reconocer a las autoridades estatales las carencias del servicio, y no sólo se pacte un evento mediático sin mayores impactos.
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Este miércoles, el Senado de la República recibió por parte del Poder Ejecutivo el nombramiento de Miguel Basáñez como embajador de México en Estados Unidos. Para dar trámite a su ratificación, el exsecretario particular del exgobernador, Alfredo del Mazo González, comparecerá el próximo viernes ante la Comisión de Relaciones Exteriores. En semanas pasadas, la designación del presidente Peña Nieto se hizo oficial, cuando el propio gobierno de Barack Obama dio su anuencia para esta designación.
Basáñez carece de una carrera diplomática, sin embargo, tiene a su favor la relación personal con Alfredo del Mazo González -tío del presidente Peña Nieto-, con quien trabajó cuando éste fue gobernador del Estado de México entre 1981 y 1986; y cuando fue secretario de Energía de 1986 a 1988. La carrera de Basáñez se ha encaminado a la investigación académica en instituciones de educación superior en Estados Unidos. Su designación como embajador parece un mero trámite que pasará ágilmente por la Cámara Alta.
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