Redacción
Un total de 29 ejecuciones relacionadas con el crimen organizado se han registrado en el Estado de México durante los primeros 15 días de este 2012. Pese a las firmas de convenio y discursos alusivos por parte del gobernador Eruviel Ávila de enfrentar con “todo el peso de la Ley” y “sin que le tiemble la mano”, la criminalidad parece haberse acentuado en la entidad, con homicidios cada vez más frecuentes y cruentos en el territorio estatal.
A 24 horas de que el gobernador Eruviel Ávila aseguró que no existe ningún desafío por parte de los criminales hacia las autoridades estatales, ayer domingo, se registraron un par de ejecuciones. La primera, se reportó en el municipio de Lerma, cuyo cadáver presentaba dos impactos de bala calibre 38 en la cabeza. En la zona, se localizaron cuatro casquillos percutidos. La segunda, ocurrida en Naucalpan, en la colonia Valle Dorado, cuyo cadáver se encontraba al interior de una camioneta tipo Pick Up.
Apenas el pasado lunes, también en el municipio de Naucalpan, tres cuerpos decapitados fueron hallados al interior de una camioneta calcinada. Metros más adelante, fueron encontradas las cabezas de los cadáveres. En la ejecución se localizó un narcomensaje firmado por la organización criminal “La Mano con Ojos”, cuyo líder de la banda fue detenido por la Procuraduría de Justicia estatal desde el año pasado, pero su presencia no ha sido intimidada, y ha permanecido vigente y actuante en múltiples ejecuciones del crimen organizado.
El miércoles, cerca del centro comercial Santa Fe, en la delegación Cuajimalpa del Distrito Federal, fue encontrada una pareja decapitada en una camioneta incendiada, junto con un mensaje presuntamente firmado por el Cártel de Sinaloa. El modus operandi fue muy similar a la ejecución ocurrida en Naucalpan, por lo que las procuradurías de justicia mexiquense y capitalina emprendieron una investigación conjunta para deslindar responsabilidades.
También la semana pasada en el Estado de México, se registraron 5 ejecuciones en Ecatepec, 3 en Chalco, y una más en Atizapán. La presencia de la delincuencia organizada parece incontrolable, y desafiante –pese a la negación discursiva de las autoridades estatales- ante la incapacidad de castigar a los presuntos responsables de las ejecuciones, y la sensación de prevalencia de un amplio estado de impunidad, a pesar de las detenciones emprendidas y profundamente difundidas por la Procuraduría General de Justicia y la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
Mientras tanto, las autoridades policíacas y ministeriales permanecen instaladas en el discurso de que los homicidios ocurridos en el Estado de México son casos aislados, y no son muestra de preocupación ya que forman parte del ajuste de cuentas entre bandas rivales. Sin embargo, apenas el pasado 8 de enero, un comando armado atacó a balazos un modulo de atención de la Secretaria de Seguridad Ciudadana (SSC), y dejó como saldo dos elementos heridos y uno más muerto, como parte se dijo, de las acciones emprendidas en contra del crimen organizado.
En medio de la criminalidad creciente, el gobernador de la entidad Eruviel Ávila atinó a decir durante el fin de semana, que su gobierno ya prepara una estrategia integral para atacar al crimen organizado, la cual se diseña en conjunto con el Ejército Mexicano, sin dar mayores detalles o especificaciones de las acciones que buscan frenar la ola de violencia que parece imparable e impune durante la primera quincena de este año.
